lunes, 18 de julio de 2016

Pagar incremento salarial no compra silencio

"Miénteme más
que me hace tu maldad feliz"

El gobierno revolucionario de México esta tan acostumbrado a comprar conciencias y votos que ante la movilización de  maestros por todo el territorio y que obligaron a la dirigencia nacional del SNTE a presentar las demandas magisteriales;  por arte de magia aparecieron dineros "de las economías de la propia SEP" para pagar el raquítico incremento salarial en Carrera Magisterial ¡cómo si eso fuera lo prioritario!

¡Como si no supiéramos los maestros que, tan solo en secundarias, un poco más del 30% de docentes tiene un nivel de Carrera Magisterial!

Con dinero, con dádivas los tecnócratas  que gobiernan sueñan que el descontento entre los maestros está controlado.

La realidad es otra: la reforma laboral que se aplica al magisterio y que en nada contribuye a elevar la calidad de la educación que se ofreció como garantía constitucional a la nación mexicana,  borró los derechos laborales adquiridos antes de su aprobación
.
Evaluar el desempeño docente con la premisa de que el que no aprueba será catalogado como no apto para impartir clases, no soluciona nada. México requiere con urgencia una Reforma Educativa con materias (currículo escolar) que motiven a la investigación para generar  científicos y técnicos que contribuyan a la riqueza nacional. Es urgente retomar la enseñanza de la creación humanista para que nuestros jóvenes sea críticos de la realidad y propongan políticas que en verdad contribuyan a sacar de la miseria a la gran mayoría de mexicanos que hoy son vistos solo como vendedores de votos que aseguran la pantalla democratizadora que se exige a los gobiernos posrevolucionarios.

Evaluar al docente con la premisa de que solo obteniendo la excelencia académica medible con un instrumento lo hará merecedor de un incremento salarial importante es negarle el derecho a un salario digno acorde a la importancia que debería tener  la enseñanza pública en nuestro país.

Los maestros hoy en México están aprendiendo de nueva cuenta que solo hablando y en las calles se recupera el prestigio de ser un trabajador al servicio del pueblo y como tal, tenemos derechos que no pueden ser fichas de juego en la política financiera en la que se ha insertado la economía mexicana.



La escuela pública debería ser la base ideológica donde se sustente el proyecto de nación y mientras el proyecto de nación no tenga como eje que todos los mexicanos logren una vida digna,   siempre estará en la mira privatizadora de los grandes concentradores de la riqueza.
Profra. Josefina Sánchez Ponce

No hay comentarios: