domingo, 29 de septiembre de 2013

Precaución :"Zona Inundable"

Declarada zona de desastre
por cambio climático
  “Se requiere de la sistematización de responsabilidades y tareas de toda la sociedad para alcanzar un compromiso individual y colectivo con la reducción del riesgo,”
Irasema Alcántara

Todos los años México es asolado por huracanes o tormentas tropicales, fuertes lluvias o inviernos extremos y sismos de distintas magnitudes.
Todos los años en México se destinan millones de pesos para ayudar a los damnificados por los fenómenos naturales.
Lo más curioso es que los afectados en la gran mayoría de los casos  es la población de escasos recursos o la disminuida clase media. ¿Alguien tendrá el dato si los más ricos de México han sufrido inundaciones, derrames de aguas negras o se han inundado por los desbordes de ríos y arroyos pluviales?

Los datos son escalofriantes: el gobierno federal destina el 3.1% del presupuesto de la nación para atender, dar respuesta y reconstruir las afectaciones por los desastres naturales y solo el 0.1% en campañas de prevención.
Si los gobiernos ya saben que zonas son inundables, o conocen los mapas hidrológicos y saben de los bosques  que han sido talados o les han dejado constancia de los manglares desecados  o por lo menos, recorrieron el país que gobiernan ¿No sería lógico que se aumentara el presupuesto  destinado a la prevención (0.1%) para que todas las familias que han tenido que vivir en las zonas de riesgo tomaran las precauciones necesarias?

Quizás sea que el paseo de los gobernantes “supervisando la distribución de las ayudas o la organización de las colectas” deja más votos que una ciudadanía informada.

Duele ver la desesperación de las personas que perdieron todo lo que tenían. Enfurece ver a los mexicanos que  pierden sus casas construidas en lechos de arroyos por constructoras donde la casta gobernante ha encontrado otro filón a su insaciable ambición de riquezas (“producto de su trabajo” dice el ex gobernador interino de Coahuila  Jorge Torres López)

Los permisos para construir en zonas de riesgo siguen fluyendo autorizados por las secretarías correspondientes de todos los estados.

En esta parte de la República, los vecinos de Piedras Negras que les asignaron viviendas de interés social  construidas en las zonas de arroyos pluviales siguen esperando JUSTICIA.

Es urgente que los mexicanos asumamos la protección de nuestro patrimonio; la sociedad de la Ciudad de México lo demostró en 1985: no necesitamos gobernantes mediocres necesitamos aprender ya que con la naturaleza no se juega; necesitamos conocer y reconocer la geografía de cada municipio, de cada colonia, de cada conjunto habitacional que se nos entrega a los trabajadores. Necesitamos EXIGIR a cada funcionario público que asuma la responsabilidad social y penal que le corresponda por permitir que la vida de miles de mexicanos esté en riesgo por que no están cumpliendo con el trabajo que estamos pagando y que ellos fueron a pedirnos casa por casa durante sus campañas electorales.

Profra. Josefina Sánchez Ponce.