A unos cuantos días de que en esta frontera recordemos que la naturaleza es impredecible. Los niños del 2004 reviven el horror de haber sobrevivido a un tornado de categoría F4.
“El día 04 de abril mi hermano Ariel y yo veníamos de la escuela a la que íbamos en la tarde.
Mi mamá fue a recogernos como a las 6, íbamos ya rumbo a la casa pero de repente se empezó a nublar muy feo y nosotros nos asustamos, cuando ya estábamos por la guardería del IMSS, vimos como todos los carros se empezaron a empalmar y todos pitaban y se pasaban las luces, altos y semáforos. Cuando llegamos al CBTIS se vino bien fuerte la lluvia, con mucho viento y granizo. Todos los anuncios se nos venían encima del carro. No se veía nada, había mucha tierra y con el agua no podía manejar mi mamá. Se quería parar, pero las cosas que volaban por arriba de nosotros se movían.
Mi mamá bien asustada nos dijo a mi hermano y a mí que nos agarráramos y nos tapáramos los ojos, pero nosotros queríamos ver porque teníamos miedo de que chocáramos con otro carro o que algo nos pasara volando.
En la radio oímos lo que se pudo escuchar que era un tornado.
Luego que pudimos llegar a la casa en la colonia Cumbres, nos dimos cuenta que tuvimos mucha suerte de que nada nos hubiera pasado, ya que mucha gente tubo accidentes y perdió cosas materiales y familiares.
Fue todo tan de repente que nunca lo hemos olvidado”.
Autora: Nala Gómez Flores.
Edad 14 años
Esc. Sec. “Benito Juárez”
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