martes, 7 de mayo de 2013

Migrantes V.I.P.


México siempre atrás, siempre fiel.
“…nunca descanses, 
pues nos falta andar bastante 

vamos todos adelante 

para juntos terminar 

con la ignorancia que nos trae sugestionados 

con modelos importados 

que no son la solución”
Rubén Blades

Campanas al vuelo y abrazos entre los miembros de la casta política. Risas de quienes se preparan para dirigir la macroeconomía  y asumir las gerencias de trasnacionales  sembradas en el suelo patrio. Sueños de opio para “la raza”. 

Días antes de la visita de Obama a México y de su loado discurso quimérico, su Secretario de Estado llamó a América Latina, de nueva cuenta “Traspatio de Estados Unidos”. Y recordé el olvidado termino de los Chicago Boys que  se encumbraron durante las dictaduras de Argentina y Chile y Uruguay y Paraguay y de todos los países latinoamericanos que fuimos  proveedores de materia prima para el Capital norteamericano, al  que muy poco le importaba la vida de los jóvenes que soñaban con un mundo donde hubiera un espacio para la disidencia.

Escucho las loas para la promesa de “becas” y vuelvo a sentir que los intereses norteamericanos son más importantes que los intereses de la gente. El fantasma de la fuga de cerebros con permisos de trabajo recorre las Universidades públicas de América Latina. Sin inversión para la investigación o la generación de tecnologías propias para que la calidad de vida de la población se convierta en  una realidad tangible de nuestros pueblos nuestros jóvenes engrosaran las filas de mano de obra calificada en las industrias del primer mundo.

En estos momentos en que el petróleo, el agua dulce y el oro  son requeridos por la tecnología y el capital norteamericano y canadiense  es  lamentable que se tratara tan a la ligera las palabras del presidente de los Estados Unidos, país que hasta el momento no  ha asumido realmente su responsabilidad por todos los muertos que el narco ha provocado en nuestra tierra, ni un solo compromiso ético por el robo de los patentes de los productos alimenticios de nuestros países que la empresa  Monsanto ha hecho para acrecentar su criminal riqueza mientras que en América Latina, África y Asia millones de seres humanos mueren de hambre o padecen de desnutrición  congénita.

México no es el traspatio de nadie donde se arroja lo que en casa no se usa. Los jóvenes de México tienen el derecho de elegir su rumbo dentro de la Patria. Los mexicanos demandamos un gobierno capaz de exigir una explicación al Secretario de Estado de la Unión Americana por volvernos a llamar “traspatio”. La población que padece el dolor de los hijos perdidos en la guerra sangrienta del narco exige compromisos con el país que vende las armas a los delincuentes  y no solo discursos que se oyen bonito pero que no dicen nada ante la realidad de un país agraviado.