NI UN JOVEN MÁS
siempre queda el soma: medio gramo para una de asueto, un gramo para fin de semana,
dos gramos para viaje al bello Oriente , tres para una oscura eternidad en la luna
Un gramo de soma es todo lo que necesitas para ser feliz"
Un Mundo Feliz
Aldous Huxley
Ante la incapacidad que hemos demostrado para formar a los jóvenes, que el día de mañana tomarán nuestro lugar, creo que hemos elegido borrarlos del planeta antes de que ellos nos reclamen por asesinar sus sueños aún antes de crearlos.
Si no, ¿Cómo se puede proponer un debate sobre la legalización del consumo de todo tipo de drogas porque es la “única manera” que los gobiernos tienen para erradicar un problema que ha generado enormes fortunas para unos cuantos y la muerte del alma y del cuerpo de millones de seres humanos?
La realidad va mas allá de la incapacidad de los gobiernos de los distintos países que se ven afectados por este problema global. Al parecer las presiones del crimen organizado esta tocando las puertas de legisladores y “gentes de buena conciencia” que buscan abrir la Caja de Pandora legalizando sustancias que los científicos han demostrado que lo que provocan es la destrucción de todo signo de conciencia.
Por ejemplo, el alcohol, droga legal, es el detonante de la violencia doméstica que ha llevado a la desintegración de millones de hogares y es la tercera causa de muerte en los Estados Unidos, la mayoría de ellos menores de 24 años.
Sicópatas estudiados han estado bajo el influjo de sicotrópicos legales cuando han cometido los más atroces delitos.
Accidentes laborales y de transito han tenido su origen en el consumo de las drogas legales. ¿Dónde están entonces las bases para pensar que legalizándolas van a bajar los daños sociales que están provocando en este momento?
La manipulación de la información pareciera tener un trasfondo malvado para mover la opinión hacia una legalización que se transformaría en un virtual alto a la guerra declarada a las mafias de la droga en todo el mundo. El asesinato de jóvenes inocentes arrastrados al oscuro mundo de la delincuencia no puede quedar impune amparándose con manifiestos y referendos por la legalización.
Pero lo que seria aberrante es imaginar que tras los movimientos por la legalización están los mismos grupos de poder político y económico que no les convienen la generación de corrientes de pensamiento que pongan en riesgo el control de los destinos del mundo.
Las voces que se levantan en Cd. Juárez “Por ni uno más” debe ser un llamado nacional de solidaridad que nazca desde nuestro hogar: Ni un joven más atrapado por la delincuencia, ni un joven más olvidado por la sociedad ni el estado, ni un joven más arrojado al desempleo a la depresión, ni un joven más discriminado. Ni un joven más que se le coarte la libertad para crear y cuestionar la realidad del mundo en el que él también vive y forma parte.
Legalizar el consumo de drogas antes que invertir nuestro tiempo para educar en valores y con amor a nuestros jóvenes nos lleva a la debacle ¿Quién levantará entonces la mano y la voz para proteger a los ancianos en que nos estamos convirtiendo si dejamos que las drogas vuelvan zombis a nuestros hijos?
Profra. Josefina Sánchez Ponce